¿Una paternidad psicoactiva?
Una de las cosas que considero de lo más interesante en la observación sistemática de la cultura, es visualizar la manera en que los fenómenos van evolucionando con el tiempo. Este es el caso de una tendencia que ya hace varios años identificamos aquí en relación a los llamados "padres quemados" y su vínculo con las adicciones como método de regulación emocional.
Si en algún momento las primeras crónicas de madres descontroladas con el alcohol o las drogas (https://www.riorevuelto.org/site/ip/ventana.php?id_articulo=3993) podían llegar a causar algún revuelo con mails iracundos hacia el periódico que las publicaba, progresivamente aunque con distintas variantes este tipo de relatos fueron apareciendo en más sitios y columnas de opinión. Entonces lo que en una primera instancia podía ser un acto consciente de descompresión, en los posteriores relatos era un simple desliz o un error con drogas de prescripción médica (https://www.riorevuelto.org/site/index.php?text=ip_foro1&id_comment=533). De la misma manera se pasó de una desesperanzada confesión de disfuncionalidad a una reivindicación de la experiencia de la paternidad con la ayuda de los estupefacientes.
En esta última línea, el más reciente giro en esta saga que podríamos llamar "Padres bajo los efectos de…" nos encuentra con una columna de la semana pasada titulada sin eufemismos "Pot for parents" ("marihuana para padres"). En ella un padre relata cómo debido a dolores de espalda y estrés se le recetan brownies de marihuana que comienza a ingerir con habilitación legal, algo que cambia no sólo su visión de la realidad sino que le concede lo que define como "Parental Attention Surplus Syndrome", un "excedente de atención" para dedicarle a sus hijos a quienes antes prácticamente ignoraba.
En comparación con narraciones anteriores ahora se incluye un pequeño párrafo tipo "disclaimer" en donde se plantean los posibles efectos nocivos de la sustancia psicoactiva, advertencia que este padre decide ignorar básicamente "por cuestiones de tiempo". Gracias por los brownies doctor.
Resulta complejo saber si es que las historias se han suavizado y perdido cierta crudeza inicial o es simplemente que nos hemos acostumbrado a escucharlas. Asimismo es notable cómo desde los títulos, al tono casi paródico e incluso las estéticas que acompañan las notas, pareciera haber cierta reivindicación jocosa.
Dos cuestiones más del último artículo que no quiero dejar pasar, por un lado la aparente laxitud para recetar marihuana ante el estrés y los problemas para dormir, temas que el protagonista vincula sólo tangencialmente con su estilo de vida. Mejor no escarbar. Por otro lado vale notar que aquí ya no sólo se habla de revitalizar la experiencia de ser padres, sino de forma más indirecta la experiencia vital.
"As anyone who inhaled during college can attest, cannabis enhances the ability to perceive beauty, complexity and novelty in otherwise mundane things…"
¿Hacia dónde continuará esta saga? Difícil saber con exactitud, pero podemos intentar imaginarlo en vista de varios de los fenómenos actuales (auge de lenguajes psicoactivos, aumento del cinismo, crisis de modelos tradicionales, etc.).
To be continued…
Pot for Parents